En el comunicado publicado en Gudari Eguna de 2009 planteábamos varias preguntas a quienes tienen responsabilidades en la opresión de Euskal Herria. Una respuesta positiva traería el final de la negación de derechos que sufrimos y del consiguiente conflicto.
He aquí su respuesta, similar a la de otros responsables irresponsables a lo largo de la historia: represión, tortura, detenciones judiciales y extrajudiciales, nuevos pasos en la política criminal contra los presos y sus familiares...
Cuando los vascos tendemos la mano, responden con dureza; cuando hacemos ofertas que pueden acercar la paz, más guerra. Saben que no podrán mantener preso mucho tiempo a este pueblo al que no han podido doblegar con la guerra a través de los siglos y atacan con todo lo que tienen en las manos, como si ésta fuera la última oportunidad que tienen para inclinar la balanza hacia su lado.
Por debajo de todas las apareciencias de fortaleza, el español es un estado que nunca ha conseguido estabilidad, lleno de grietas por todos los lados. Es falsa la imagen que pretenden dar de firmeza, es falsa su unidad, y son de arena las bases del edificio que han construido. A alguien le parecerá sorprendente esto viendo la dimensión del ataque que sufre Euskal Herria, los cheques en blanco que sufren todos estos ataques o el odio que se muestra. Pero su debilidad es pareja a las mentiras que utilizan y a la prepotencia que emplean. Saben qué es lo que ha llegado y se están preparando para ello. Quieren deshacer el tejido de Euskal Herria para que no se convierta en una vela que nos empuje lejos cuando el viento se ponga a favor.
Nuestro objetivo no es hundir el Estado español. Lo único que pide este pueblo es que le dejen en paz de una vez para poder elegir su futuro de modo libre. Y el enemigo sabe que cuando eso ocurra, si los pueblos que están bajo su bota recuperan la libertad, su sentido y ser se perderán. La cuenta atrás ha comenzado, su fecha de caducidad pasó hace tiempo.
¡Adelante la izquierda abertzale!
La forma de ser de Euskal Herria no consiste en hacer cálculos ni en quedarse mirando la televisión para ver cuándo se hace añicos el enemigo o cuando deja de ser enemigo. La idiosincracia de los vascos nos lleva a actuar. Por eso no nos han doblegado nunca; queremos hacer nuestro futuro, queremos construir y no cejaremos hasta que no se abra esa oportunidad.
La izquierda abertzale, que es el motor de la lucha de este pueblo, ha hablado y ETA hace suyas esas palabras. No nos podemos quedar mirando al enemigo, es hora de tomar la delantera y actuar, ahora mismo. En este momento en que el enemigo nos dirige el ataque más virulento, no podemos quedarnos en la simple resistencia. Teniendo claro que hay que responder a la represión, que hay que levantar un muro popular frente a los nuevos pasos del enemigo, y siendo conscientes de la importancia que esto tiene, tenemos que responderles con esa misma capacidad de iniciativa que quieren ahogar. Es cierto que, más que en aguantar la represión, nuestra mayor fuerza está en la lucha política. Este pueblo quiere vivir, y las razones del enemigo se quedan cortas frente a las de la izquierda abertzale en el debate político. Por eso, durante largos años hemos ido dando pasos en una lucha política que ha tenido diferentes expresiones y herramientas. Todavía no, pero vendrá el momento de enfrentarnos a nuestros actuales enemigos en otros terrenos. Quizás antes de lo que muchos creen y desean, veremos a selecciones de dos pueblos soberanos enfrentarse, y quizás, sólo quizás, se asumirán con más tranquilidad la victoria o la derrota, reducidas a una cuestión deportiva, cuando lo que esté en juego ya no sea la supervivencia de uno u otro.
La iniciativa es nuestra. La izquierda abertzale es la única que, además de defender su proyecto político, propone un marco que incluye las opciones de poder defender con libertad y desarrollar todos los proyectos políticos. Y a eso no se le puede hacer frente en el debate político. El proyecto político opresor que se sitúa enfrente ha fracasado, no ha logrado mantener su quimera. Está a la vista de todos que Euskal Herria no tiene sitio en el proyecto español. La izquierda abertzale, muchas veces en solitario, ha dicho que bajo el dominio español y francés Euskal Herria está en trance de desaparición. Con el tiempo, muchos lo han asumido. La derrota del enemigo es doble, si a esto se le une la incapacidad de acabar con la izquierda abertzale.
Tenemos que felicitar a la izquierda abertzale por la fuerza y la firmeza que ha demostrado a lo largo de los años. Porque por encima de todos los ataques ha estado firme en la lucha, con la cabeza alta, y a la vez haciendo propuestas, uniendo el puño y la mano tendida. Eso lo vimos en Altsasu, la izquierda abertzale plural de siempre, diferentes procedencias, generaciones, actitudes y formas de ser, unidas en el trabajo común. Ese ha sido uno de los secretos de la izquierda abertzale, viva en los debates y firme en las decisiones, una.
Eso es lo que tenemos para ofrecer a todos los que tengan voluntad de trabajo, la capacidad de actuar conjuntamente en torno a una idea y un proyecto, manteniendo cada uno su personalidad y su ser. El enemigo ha intentado quebrar eso de un modo u otro, sembrando mentiras, difundiendo filtraciones, creando y alimentando supuestos disidentes... pero ha sido en vano. Después de todas estas trampas, la izquierda abertzale sigue siendo la principal referencia en el proceso de liberación vasca.
Recientemente dimos cuenta de la reflexión que acabamos de realizar. La izquierda abertzale también está inmersa en el debate. Buscando ser más eficaces en lo sucesivo, nunca hemos tenido miedo a mirar las cosas hechas desde la autocrítica más rigurosa. No tenemos miedo a aceptar las cosas mal hechas, para profundizar en el debate político, para sacar nuevas verdades de esa dialéctica. El debate, la autocrítica y la lucha han caracterizado la trayectoria de la izquierda abertzale, y el debate, la autocrítica y la lucha la caracterizarán también en el futuro.
¡Adelante con el proceso democrático!
En lo sucesivo, el eje de la lucha de la izquierda abertzale será el proceso democrático. El proceso democrático que se lleva a cabo para democratizar una evidente situación jurídico-política de imposición.
Es democrático, porque para llegar a sus objetivos se desarrolla mediante el diálogo, la negociación, el acuerdo político y, en suma, mediante mecanismos participativos y democráticos. Es decir, porque es un proceso para superar el conflicto político en términos democráticos.
El proceso democrático es un proceso político que tiene como ejes el procedimiento para recoger la palabra del pueblo, acordar la formulación del derecho de autodeterminación y respetar la voluntad política de la ciudadanía. Es el proceso para poner en vigor los derechos nacionales de Euskal Herria y los derechos políticos y civiles de la ciudadanía. Es el proceso político gradual, reglado y consensuado para llevar a Euskal Herria al escenario de la autodeterminación. El proceso para dotar a nuestro pueblo de mecanismos políticos y jurídicos para pasar de la situación de opresión a de reconocimiento.
El proceso democrático es el proceso para abrir puertas. Este pueblo tendrá que decidir después hasta dónde quiere cruzar esas puertas. La izquierda abertzale sabe hace tiempo que la supervivencia de este pueblo está ligada ineludiblemente a la independencia. Llegados ahí, la izquierda abertzale podrá competir con otras fuerzas en igualdad de condiciones, y no tengamos duda de que si hemos avanzado mucho en el debate político en condiciones difíciles, en esas condiciones ganaremos ese debate.
El proceso democrático tendrá enfrente marcos autonómico-forales agotados y sus intentos de refoma y restauración-eternización. Estos pueden frustrar las condiciones políticas conseguidas mediante décadas de lucha y dejar la opción de libertad de nuestro pueblo cubierta de zarzas. Tenemos que pelear desde hoy esas opciones, con todas las fuerzas. El proceso democrático no es solamente la mejor opción para este pueblo, sino la única, y tenemos que mostrarlo con claridad.
Tenemos que entender que la principal garantía del proceso democrático es nuestro pueblo. Porque sólo se puede liberar y llevar al objetivo con las fuerzas de nuestro pueblo, solamente se puede condicionar con las fuerzas de nuestro pueblo, sólo se puede abrir, construir y llevar a término con el impulso de nuestro pueblo.
Lo andado enseña a dar nuevos pasos y tenemos que remarcar dos lecciones de las experiencias obtenidas: Si no se produce esa activación popular que es la garantía principal, si se queda a la sombra de los espacios de negociación, ese proceso no avanzará. Y, en la misma medida, el proceso democrático no se puede llevar a cabo sin la participación del Estado. Su participación tendrá que consistir, como mínimo, en abandonar la injerencia que practica en Euskal Herria. Una tregua o alto el fuego de ETA no trae como consecuencia que haya un proceso democrático.
Si el proceso democrático se debe llevar a cabo utilizando herramientas democráticas y sin injerencias, y así lo vemos nosotros también, deben cesar la interferencia y las violencias del Estado. Teniendo en cuenta que el enemigo no tendrá ninguna voluntad de emprender un proceso democrático, ¿cómo empujaremos para que tome ese camino y para que se mantenga después? La activación de todo el pueblo y la presión nos llevará al proceso democrático y la activación popular garantizará que ese proceso llegue a buen término.
Poniendo el acento por tanto en la aceleración y el reforzamiento del pueblo, ETA se reafirma en los principales esquemas de Anoeta. Siendo el proceso democrático un proceso para que dar la voz al pueblo-para que el pueblo tome la voz, la mencionada activación popular será la principal garantía, motor y eje de tracción.
Para satisfacer los deseos del pueblo, habrá que crear espacios de diálogo y negociación para superar las actuales leyes e instituciones y para adaptarlas a una situación democráticas. Y la ciudadanía vasca tendrá que refrendar los acuerdos allí alcanzados. Junto a ello, en otro espacio de negociación ETA y el Estado tendrán que abordar las consecuencias del conflicto.
Organizarse y luchar
La situación de opresión y el consiguiente conflicto están al rojo vivo, pero ahora podríamos encontrarnos en la fase previa al proceso democrático. Esta fase, y también la que vendrá después, estarán caracterizadas por la lucha. Con ella hemos creado las condiciones para el proceso democrático y con ella lograremos que florezcan y que dén fruto.
El 21 de diciembre de 1978, unas horas antes de que los verdugos enemigos pusieran bajo su coche la bomba que lo mataría, `Argala' hizo una grabación dirigida a su localidad natal. En este último comunicado del 50 aniversario de ETA hemos querido recordar algunas palabras de esa grabación:
«(...) Se grita `ETA herria zurekin' y yo no creo que este grito es negativo en la medida en que con ello no se trata de que ETA solucione los problemas de todos, que evidentemente no puede solucionarlos (...) Ni ETA ni todo KAS ni HB ni ninguna formación política, por amplia que sea, puede solucionar los problemas de la clase trabajadora vasca, del pueblo trabajador vasco. Unicamente el mismo pueblo trabajador vasco puede solucionarse sus problemas (...) Pero nadie que grite `ETA herria zurekin', nadie que comparta los objetivos que hoy defiende KAS, nadie que esté de acuerdo con la lucha de ETA, nadie de éstos puede quedar al margen de la lucha y no puede quedar al margen de la organización. Sólo un pueblo organizado puede conseguir los objetivos a los que aspira. Animo, a organizarse y a pelear».
No será ETA la que consiga la libertad de Euskal Herria. No serán los partidos políticos los que nos acercarán a la libertad. A Euskal Herria la liberará el mismo pueblo. Lo queremos remarcar también hoy. La victoria está en la lucha y queremos llamar a nuestro pueblo y cada ciudadano a que se organice y luche, convirtiéndose en protagonista en la liberación de nuestro pueblo. Implicarse en esta lucha tan dura como hermosa merece la pena, este pueblo merece la pena.
Las últimas palabras son para todos los que han puesto su grano de arena en esta lucha, especialmente los compañeros de lucha que han dado y dan todo en las cárceles de exterminio, los que están en el exilio y, cómo no, los caídos en el camino. Ezaren gudaz baietza sortuz... ¡lo conseguiremos! Gora Euskal Herria askatuta! Gora Euskal Herria sozialista! Jo ta ke independentzia eta sozialismoa lortu arte!
En Euskal Herria,
31 de diciembre de 2009
Euskadi Ta Askatasuna
E.T.A.
http://www.gara.net/paperezkoa/20100119/177927/es/Traduccion-integra-castellano-Comunicado-ETA-Euskal-Herria
No hay comentarios:
Publicar un comentario